viernes, 6 de diciembre de 2013

Recuerdos

De vez en cuando nunca venía mal recordar, recordar el pasado que a veces tanto se había molestado en olvidar, pero ahora, estaba dedicándose a recordarlo, tomándose su tiempo para hacerlo mientras disfrutaba de aquel té de fresas con nata, era extraño, solo tomaba té cuando Petter le obligaba o su padre le invitaba, aunque a decir verdad hacía siglos que no veía a su padre, y cierta parte en su interior le extrañaba, pero seguía odiandole demasiado como para presentarse en su casa y hablar con él. Suspiró con levedad y miró hacia el cielo acomodándose en esa hamaca que tenía en el porche de aquel gigantesco árbol que había convertido en su casa. mientras se balanceaba de un lado a otro recordó la ultima ve que habló con su padre.

" - ¿En qué has cambiado? ¿En qué has crecido? Para mí no parece como si hubieras cambiado tanto como para no ser la misma persona de antes. Dime entonces, ¿en qué punto no eres exactamente tú?" 

Esas fueron las palabras que le dedicó su padre, palabras que le dijo cuando el se dignó a volver, aunque claro, no volvió como Gilbert sino con Neo, y parecía que eso no le terminaba de agradar, quizás era algo normal, pese a todo, pese a que fuera él quien lo odiara, pareció que el enfadado con todos era Revi.

"- Honestamente, sigues siendo alguien con quién no se puede razonar. Como siempre.¿Sabes? Aun así…dices que está bien perdonarme y ¿ como perdonarte a ti? 
- No puedes Gilbert, nunca vas a poder perdonarme"

Cerró los ojo ante ese recuerdo, no era demasiado alegre a decir verdad, y sin embargo ese hombre fue el único que le había enseñado a tener una familia de verdad, hasta la muerte de Lacie, desde ese momento Revi cambió completamente, y por eso no podía perdonarle, no podía perdonarle nada a alguien que no se perdonaba a si mismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario